¿Quién es? No tardan mucho. La convocatoria aparece el domingo 15 y uno o dos días después surge el candidato al que se sumarán el resto. En el PRI conocen que no pueden dar una sola ventaja, porque son oposición aunque tengan mayoría en Congreso y Ayuntamientos. Les falta para este proceso consolidar esas posiciones y ganar el gobierno.

El caso de Jalisco es ilustrativo: Jorge Aristóteles Sandoval, presidente municipal de Guadalajara, recibió un par de misiles con toda la intención sobre decires que almacenan en las oficinas de investigación y justicia del gobierno federal. Algo parecido al golpe que oficialmente le dieron desde la PGR al entonces candidato del PRI en Guerrero, Manuel Añorve, y luego le dieron el clásico: “Usted disculpe”. El trancazo estaba dado. Así ha sido con Manuel Martínez Garrigós en Cuernavaca, incluida la permanente campaña que un medio informativo por razones más que conocidas le ha enderezado hace años. Cualquiera puede serlo, él o Amado, quizá Guillermo del Valle. Pero nos remitimos al caso de Jorge Aristóteles que es candidato de unidad a gobernador de Jalisco; y hagamos memoria: la perla tapatía, la eterna primavera, Aguascalientes y otras capitales que el PRI arrebató al PAN en el 2009 estaban en un programa ex profeso diseñado para acabar con sus presidentes. Es una estrategia nacional fortalecida localmente, y en ella participan no sólo los gobiernos, también empresas privadas. La carne, toda, al asador, para salvar al PAN en la elección. No han tenido resultados tangibles; sin embargo, han logrado meter dudas, bajar puntos a sus rivales, aunque ellos no crezcan.

Un instituto pobre

¿Qué criterios usan en el Congreso local para la asignación de presupuestos en años electorales? Los diputados tienen que revisar eventos de esta naturaleza tanto aquí como en otras entidades. Los comicios locales de julio se empatan con los federales para presidente de la república, senadores y diputados federales y normalmente implican temas extraordinarios. Es de simple lógica que los dineros para el Instituto Estatal Electoral son unos en años inhábiles –por llamarlos de una manera-- y los de comicios. El proceso que vivimos, a decir de expertos, será el más intenso y extenso de la historia; van a requerir de equipo logístico extraordinario.

Es parecido al presupuesto del Tribunal Estatal Electoral que como nunca va a tener denuncias en sus escritorios y también como nunca las va a tener que resolver. ¿Con qué personal si reciben una miseria? Nos gustaría saber quiénes determinan los montos, si son expertos o simplemente burócratas, porque una elección tan importante no se puede colocar en la línea de riesgo por cuestiones burocráticas o decisiones de corto criterio.

Leemos y vemos una y otra vez que las elecciones estatales “pueden reventar” por la falta de recursos, que los diputados no han hecho caso, que han avisado con tiempo sin respuesta. Cada vez es menor el tiempo para que las cosas se acomoden tanto en el IEE como en el TEE, entidades que juegan un papel trascendente este año y el próximo –sobre todo esta última--. Las alertas que han hecho tienen registro desde octubre y estamos en enero de otro año. No hay respuesta. Los legisladores están a tiempo. Que lo hagan. En caso de que lo difundido por el IEE y el TEE hace muchísimas semanas complique lo que será de por sí una dura competencia y la ensucie, ojalá y haya tiempo para juzgar a los irresponsables, sean quiénes sean. Las llamadas están dadas; faltan las respuestas…

Como en feria

Une breve vuelta por Emiliano Zapata y Xochitepec el sábado anterior nos llevó a la realidad que cada región vive en este proceso electoral. No sabemos si cumplen o no con la ley, pero los espectaculares, gallardetes, bardas y demás enmarcan el de por sí bello colorido de pueblos como el de Xochitepec, tradicional, bonito y amistoso. Que Ciro Peralta, que Manuel Carrillo, que Mauricio González. O en Zapata, que un nombre saltaba a otro y no nos quedamos con ninguno que “pegara”.

Así está el resto de la entidad, con todos jugando por su partido que no aparece en la publicidad, pero por los colores se adivina. Nos llamó la atención que teníamos en la mente el mitin de Andrés Manuel López Obrador en el zócalo de Zapata, días atrás, que las crónicas mencionaban a los que peleaban por estar en el templete, a los que llenaron de camisetas con su leyenda como la esposa del presidente municipal Alberto Figueroa (dicen en el pueblo que ella dice la primera y última palabra en asuntos del Ayuntamiento y es una especie de Evita Perón, Cristina Kirchner si bien van, o de Marta Sahagún si el asunto no cuaja).

Nos queda claro que Morelos no es Cuernavaca, pero para ello hay que dar la vuelta.