El presidente de la Junta Política y de Gobierno del Congreso del estado, Julio Espín Navarrete, informó que será hasta a mediados de este año cuando se logre resolver la deuda que enfrenta el Congreso local, ante un posible mal manejo del presupuesto del año pasado.
El legislador local aseguró que han aplicado medidas de austeridad para subsanar las deudas con proveedores y pagar a los trabajadores, aunque con retrasos en alguna quincenas, según reconoció.
Refirió que pese a las complicaciones financieras, se calcula que para el mes de julio podrían entregarse números negros y con ello evitar una nueva crisis en el Poder Legislativo.
Sin embargo, aseveró que sí habrá un deslinde de responsabilidades ante un posible mal uso de las finanzas del Congreso local. Para tal fin –agregó– se acordó la aplicación de una auditoría externa, que podría dar resultados en cuestión de semanas.
"Para eso es la auditoría, para deslindar responsabilidades y ver qué está pasando o qué sucedió. Pero no podemos adelantarnos hasta que tengamos esa información (de la auditoría)", declaró.
El presidente de la Junta Política y de Gobierno refirió que aún se analiza de qué forma se resolverá el problema de la nómina, ya que el año pasado se detectaron aviadores y lo que se busca es hacer un nuevo ajuste administrativo, que podría causar un nuevo recorte de personal.