En el dinámico mundo de las citas, donde las tendencias van y vienen, surge una práctica que destaca por su enfoque claro y honesto: el 'hardballing'. A diferencia de algunas modas que circulan en redes sociales, el 'hardballing' promete una manera saludable y emocionalmente responsable de conectarse con otras personas. En este artículo, exploraremos qué es el 'hardballing' y por qué cada mujer debería considerar adoptar esta mentalidad al buscar relaciones.

¿Qué es el 'Hardballing'?

El término 'hardballing', acuñado por el ejecutivo de la plataforma de citas Hinge, Logan Ury, se refiere a la práctica de ser transparente desde el principio respecto a las expectativas de una relación, ya sea a corto o largo plazo. Esta tendencia ganó fuerza durante la pandemia, cuando la introspección se convirtió en una herramienta valiosa para entender lo que realmente se busca en una relación.

La esencia del 'hardballing' radica en comunicar de manera clara tus deseos, decisiones y valores antes de embarcarte en una cita. También implica estar dispuesta a dejar ir a aquellas personas cuyos valores no se alinean con los propios. Esta honestidad desde el principio establece una base sólida para una experiencia de citas positiva y sin malentendidos.

Generación Z y el 'Hardballing'

La generación Z ha adoptado una mentalidad de citas directa y sin filtros, lo cual ha llevado a la popularización del 'hardballing'. Las jóvenes de veinte años han reconocido que la vida es demasiado corta para invertir tiempo en relaciones sin futuro. Este enfoque más sensato busca evitar la pérdida de tiempo al brindar claridad desde el principio.

Cómo Practicar el 'Hardballing'

La clave para practicar el 'hardballing' es la sinceridad. Explicar tus intenciones y expectativas desde el principio es esencial. Después de aclarar lo que buscas, el siguiente paso es abordar a la persona de manera respetuosa para iniciar una conversación honesta. Este compromiso no solo te permite compartir tus expectativas, sino que también crea una oportunidad para que la otra persona sea igualmente franca.

Aunque la honestidad es fundamental en el 'hardballing', también se destaca la importancia de la empatía y el tacto. Ser claro pero respetuoso es esencial; el objetivo no es herir, sino asegurarse de que ambos estén en la misma página sobre sus planes futuros en la relación.

En resumen, el 'hardballing' no es solo una tendencia pasajera. Su éxito radica en establecer desde el principio las expectativas y deseos, proporcionando a ambas partes una comprensión clara de lo que pueden esperar. Al adoptar esta práctica de citas, cada mujer tiene la oportunidad de construir relaciones más honestas y significativas.