El oftalmólogo Arturo Solís Herrera, maestro en ciencias médicas de la Universidad Autónoma de Aguascalientes y doctor en Farmacología de la Universidad de Guadalajara, es el autor de este hallazgo.
El especialista señaló que este descubrimiento fue un accidente muy afortunado al investigar posibles terapias para el glaucoma, la retinopatía diabética y la degeneración macular provocada por la edad, las tres causas más comunes de ceguera en México.
Durante estos experimentos, el científico encontró que la melanina, que es una molécula en la piel, cabello y recubrimiento de la retina humana, es capaz de romper las moléculas de agua para separar el hidrógeno y el oxígeno, con lo que se obtiene energía. Además, probó que la melanina puede unir al hidrógeno y oxígeno para formar agua, liberando una nueva carga de energía así que el ciclo se puede repetir millones de veces.
El científico mexicano llamó a este descubrimiento “Bat-gen”, y es el resultado de 20 años de investigación por cuenta y recursos propios. Tal vez por eso decidió pedir la patente al gobierno ruso, que se la otorgó en abril de 2010 con el número 6017379. Recientemente también obtuvo el registro en Estados Unidos y están en proceso de hacerlo en Europa, aunque el Dr. Solís enfatizó que la patente deja muy claro que el descubrimiento se hizo en México (por lo menos).
A través de su cuenta de Facebook, el doctor Arturo Solís señaló que este descubrimiento puede aplicarse a celulares, computadoras y otros modelos de gran escala, como automóviles eléctricos.
Fuente Directa: códigoespagueti.com